El panorama actual del periodismo, su metamorfosis en el tiempo, Internet y la situación del periodista en Italia son muchos de los temas en los que se moja Santiago Fernandez Ardanaz, vicedecano de Periodismo en la Universidad Miguel Hernandez de Elche. Me lleva hasta él su gran bagaje profesional en el mundo de la información como corresponsal en Roma y los Balcanes y su trayectoria en el Diario 16 y el Correo de Bilbao. Me recibe muy amable en su despacho y la entrevista se convierte en toda una lección de supervivencia a nivel profesional.
Pregunta. Después de muchos años en el mundo del periodismo usted sigue en contacto con el mundo de la comunicación porque forma parte del grupo Vocento, ¿Cómo ha cambiado? A nivel tecnológico se ve, pero el carácter humano, ¿cómo ha cambiado la forma de hacer periodismo?
Respuesta. Ha cambiado radicalmente la empresa, fundamentalmente porque no se ha sabido adaptar el mundo empresarial del periodismo a las novedades actuales porque el tipo de empresa que se realizaba era una empresa donde la noticia era un recurso económico más, entonces al considerar que la noticia era simplemente algo rentable, comerciable, se ha perdido de vista lo que es el núcleo principal de la noticia. Cuando deja de ser algo comerciable, o difícilmente comerciable, como es el caso de la prensa escrita o en la gratuidad de los telediarios de tv, radio y en el mundo digital, no se sabe qué hacer, se rompe el mundo empresarial.
Ahora tienen más fuerza las empresas que están detrás de los diarios de televisión y hay una línea editorial muy definida, pero se supone que los periodistas son los ojos del mundo y que no debe seguir una línea u otra.
Estás replanteando la empresa desde criterios de periodista y todas las empresas no han seguido los criterios del periodismo, por tanto la gran crisis en este momento es que no se sabe cómo hacer esa empresa, no se sabe cómo hacer rentable y éste es el gran reto y la gran dificultad en estos momentos, cara al futuro. No saben cómo hacer por ejemplo un periódico digital que sea rentable, porque los criterios que se tenían sobre la noticia, son criterios caducos. Cuando la noticia es algo mucho menos empírico mucho más difícil de capturar y de tener ligado, surgen los problemas que estamos teniendo en este momento. Hoy en día la mayor parte de estas empresas, que yo llamo empresas de negocios, no saben qué hacer, porque naturalmente les faltan los criterios, les falta la perspectiva que tiene el mundo de la comunicación.
Y ¿Cree que una solución puede ser que al frente de esas empresas estuviera gente relacionada directamente con la comunicación, periodistas?
Yo creo que sí, el gran problema que ha habido, en concreto en el grupo correo es que han sido contables. Imaginemos que por ejemplo: una cooperativa, existía hace mucho tiempo, entonces existía el sacar de las grandes fábricas muchos trabajos que se podían hacer en casa, existía el freelance, aquel que buscaba la noticia y la vendía, la comunicaba, tenía un mínimo de ser autónomo, todo esto lo he vivido yo, tanto en roma, como en Alemania, como en Francia. Yo era corresponsal era un freelancer, no era yo uno de la plantilla, nunca quise ser uno de la plantilla, porque yo quería mantener una libertad y una autonomía, también de tipo económico. Entonces, no solo era una solución el tener una pequeña propia empresa sino que me dejaba libre, me mantenía independiente. Yo tenía la posibilidad de escribir con plena libertad sin estar sujeto a líneas editoriales, naturalmente había cosas que no me publicaban pero eso ya era problema de ellos y yo también saber si yo entrego este producto que tiene ese sabor, sé que ese producto los niños no lo van a tomar y que por tanto no se va a vender.
Es un buen planteamiento el que usted propone ¿le da esperanzas, cree que se podrá hacer en un futuro?
Yo creo que sí. Desde hace tiempo fíjate. Yo tengo compañeros e hijos de antiguos compañeros, en Alemania por ejemplo, donde han empezado a hacer pequeñas empresas en el mundo digital, donde están tres, cuatro, cinco, que han comenzado a ofrecer un tipo de producto a buscar un nicho especial, que sea muy especial, de manera que tenga posibilidades de rentabilidad sino, no lo van a comprar, hablemos en plata. Entonces, estos chicos han empezado a hacer una pequeñita empresa que sirve a un montón de gente.
¿Y no caerán en manos de ese gran poder?
Si ya te he dicho que sí, que el mundo de las pequeñas empresas muren y resucitan pero tenemos que acostumbrarnos a esa movilidad. A no decir yo me siento y tengo el trasero caliente, aquí estoy quieto y nadie me mueve, no, no ese mundo se trabaja.
Internet, la gran amenaza de la prensa escrita. ¿Es algo negativo o algo que nos beneficia? Porque se están cerrando redacciones y kioscos, por ejemplo: aquí en RNE Alicante antes había 34 en plantilla, ahora solo quedan cuatro.
En todo cambio de tipo tecnológico ha habido muertos, las grandes salas de copiadores que había hasta el S. XVII desaparecen, uno dictaba y había cien copiando y se sacaban cien ejemplares, con la imprenta desaparece todo ese mundo, ¿fue negativo? Para los que lo sufrieron posiblemente fue negativo, por una falta de visión de futuro, para otros que se lanzaron y vieron que aquello era una maravilla, fue algo enorme. El mundo tecnológico es saberlo utilizar como todo instrumento tecnológico, la ciencia es aplicable, se adapta y da tecnologías nuevas. Estoy dirigiendo una tesis doctoral con una profesora tuya, en la que nos planteamos para qué sirve todo este mundo, ¿es un puro instrumento? ¿Es un instrumento rápido? Estaba en Roma cuando en el año 82 creo que fuimos de los primeros en España, el grupo correo en tener ordenadores, ¿sabes lo que significaba eso?, que yo tenía un tiempo inmenso durante el día. Porque ya era simplemente picar en el télex la noticia y podía seguirla inmediatamente.
Internet también lo que tiene es que se vierten cantidades ingentes de información, incluso se puede practicar el periodismo ciudadano.
Claro, entonces estamos en un bosque inmenso donde la clave está en la capacidad de selección y en la capacidad de seguir ciertas rutas donde, comienzas aprendiendo a seleccionar buscando elementos afines, elementos contarios, dentro de ese inmenso bosque y aprendes a valorar aquello que es pura basura.
Entonces al haber tantos datos, seleccionar una información y otra se va a convertir en una práctica mucho más habitual
Sí, claro, por lo tanto el periodista tiene que tener una capacidad fortísima de selección y si no tiene criterios de selección, pues eso, un día está vivo y al día siguiente está muerto.
Italia. El poder de la información es fuerte pero el de la política más. Silvio Berlusconi es dueño de todos los canales de comunicación de Italia. ¿Cómo se pude consentir que en el SXXI, un país que forma parte de la UE y del G20, haga esto?
El tema de Berlusconi es que en una situación muy concreta, en una sociedad, porque hay corrupción, porque desaparece el partido comunista, desaparece la democracia cristiana, desparece el partido socialista de Craxi y se queda todo en un campo inmenso de posibilidades y también de maniobras. Entonces este señor que ya tenía cuatro canales de televisión privada aprovecha para hacer un tipo de información muy dirigida y muy concreta para destruir, digamos, la fama de que pueda haber un solo político que no fuera corrupto y que por lo tanto hacía falta gente con capacidad empresarial, de sacar la empresa italiana adelante. Hay unas elecciones y las vence con una fuerza enorme, vendiendo humo, ¿por qué? Porque lo que hace es ganarse todos los ganglios y centros del poder y el primero es eliminar la RAE, la RAE es el gran contrincante de esas cuatro televisiones privadas, entonces él pasará a tener diez televisiones privadas en todos los momentos de la vida de la información y neutraliza el mundo de la televisión y radio pública con lo cual ya tiene todo. Yo me planteaba, ¿cómo un pueblo que lleva tantos años en la llamada democracia y que sin embargo los engañan como a chiquillos? Entonces un primer elemento de éxito de Berlusconi es: yo soy tan rico que no necesito hacerme corrupto, pero eso es totalmente falso, y hay números que lo demuestran claramente.
¿Están consumidos entonces por el mundo de la política?
Pero la política siempre va a estar ligada a la información, es cómo un vínculo de retroalimentación, siempre va a estar ahí y no podemos evitarlo. Pero sí que como te he dicho antes hay formas de desprenderse de la parte de la política que puede viciar nuestro trabajo y buscar nuestro propio punto de libertad y nuestra forma de ser independientes a la hora de trabajar.
¿Cómo definirías el periodismo español?
Pues yo creo que es un buen periodismo. Que ha ido evolucionando, después de la transición, que fue una época que viví yo, donde hacíamos un tipo de periodismo distinto al que se hace hoy en día. Yo trabajaba en el diario 16 y con la transición probamos una nueva fórmula, dijimos: ahora no vamos a tender tanto hacia un lado, era un periódico de centro y había algunas opiniones de derecha, pero buscamos informar a todos y no funcionó, nos lo cargamos en poco tiempo.
¿Entonces con eso nos dice que tal vez es bueno dar una información desde distintas perspectivas y que cada uno vaya a buscar lo que más le convenga?
Pues yo creo que cada medio debe mantener su propia personalidad y dar al público lo que quiere ver, con lo que se sienta representado en su día a día, sólo así sentirá interés. Pero bueno, en general yo creo que estamos evolucionando bien, creo que en este país se hace un bueno periodismo.
¿Cree que se está perdiendo el carácter informativo de la televisión y que al final se convertirá en un mero instrumento de entretenimiento?
La televisión siempre ha sido un elemento de entretenimiento y creo que aquí en España es un reflejo de su sociedad.
La parrilla de Telecinco es muy criticada, por ejemplo.
Sí, pero es que a mí a veces después de ver tanta desgracia y tanta cosa por ahí, que ha pasado esto y aquello, me apetece sentarme en el sofá y entretenerme con otras cosas. Yo creo que no es malo, es simplemente otro tipo de contenido que siempre viene bien.
¿Nos da entonces una visión positiva del mundo del periodismo hoy día?
Sí, por supuesto. Creo que se está creciendo y evolucionando favorablemente y tenemos que saber aprovecharlo y saber digerirlo para poder movernos en este mundo inmenso que se nos descubre y se nos abre ahora.
Amparo Martínez López
